Psicoterapia individual

¿Cómo trabajamos?

Este tipo de psicoterapia se centra en los síntomas y en los problemas actuales del paciente. Fundamentalmente, trabajamos el "Aquí y Ahora". Trabajamos llevando la atención hacia las causas de los problemas, diferenciando básicamente las necesidades de los deseos. Determinados patrones de pensamiento tienen efectos adversos sobre creencias, emociones y conducta, por lo que se aborda su reestructuración para la mejora de la situación actual del paciente y para la prevención de recaídas. 

Nuestros enfoques:

Tenemos por definición, un enfoque global e integral, es decir, vemos a la persona que acude a nuestras consultas de una manera holística. Nos basamos en técnicas psicoterapéuticas humanistas tales como el Anális Transaccional; Gestalt; Psicoterapia Sistémica; Programación Neurolingüistica; Bioneuroemoción, Eneagrama o Procesos de Duelo, entre otras.

Objetivos del tratamiento:

Los objetivos de terapia son lo que el paciente quiera y traiga a sesión. Es el paciente quién decide y hasta dónde quiere llegar. Y no los que el psicoterapeuta piense o quiera sobre el paciente. Los pacientes realizan un proceso de acompañamiento por un psicoterapeuta que les acoge, protege, les ayuda a darse cuenta de lo que está pasando, a tomar conciencia e identificar lo que les hace sufrir, realizando las intervenciones terapéuticas necesarias para que las personas vayan resolviendo sus conflictos, en un espacio totalmente seguro.

Abordaje de la problemática:

Concebimos a nuestros pacientes desde dos niveles de intervención.

1. Por un lado, contemplamos toda su historia de vida y lo llamamos "Proyecto Sentido". De ahí el nombre de nuestro Centro. Para cada persona, se considerará como analizar "Mi Proyecto Sentido", que parte desde un poco antes de su momento de concepción, contando con las emociones, deseos, expectativas y acontecimientos que estaban viviendo sus progenitores. El periodo de su gestación y características de su nacimiento. Hasta los tres primeros años de vida y sus vínculos emocionales con sus primeras figuras de apego, además de sus vivencias significativas o traumáticas hasta el momento actual.
2. Y por otro lado, añadimos toda la historia pasada y actual de la familia desde el enfoque sistémico. Además de la historia de los ancestros, a través de diferentes técnicas, enfoques y disciplinas como puede ser la Bioneuroemoción, Constelaciones Familiares, Psicología Transgeneracional, etc.

¿Quién puede hacer psicoterapia?

Cualquier persona, ya sean niños, adolescentes, adultos o parejas, que piense que los acontecimientos de su vida les están desbordando y no saben cómo resolver el sufrimiento que esto les produce, puede incorporarse al proceso psicoterapéutico. Recibirán apoyo emocional y ayuda para resolver conflictos con otras personas, a entender sus emociones y a buscar soluciones nuevas para sus problemas de una forma más creativa.

Encuadre psicoterapéutico:

La duración del tratamiento, dependerá de cada paciente y su motivo de consulta. Estará sujeto siempre a la voluntad de cada individuo. Únicamente se requerirá a la persona, en el caso interrumpir la terapia sin haber llegado a terminarla, que avise con tres o cuatro sesiones previas, para que se pueda cerrar emocionalmente lo que hasta ese momento se hubiera trabajado.

Por lo general, son sesiones de una hora de duración semanal. Mínimo, se recomienda un año de adherencia terapéutica. Y a partir de ese momento, se puede, de forma voluntaria, sustituir una de las sesiones individuales por una sesión grupal al mes. Más adelante, dependiendo de cada caso, se irían distanciando las sesiones con frecuencias quincenales y más tarde una mensual hasta finalizar por completo el tratamiento. 

El vínculo entre paciente y psicoterapeuta se estable aproximadamente durante las primeras cuatro o cinco sesiones. De lo contrario, se contempla la posibilidad de derivación del caso.